El diente de león, perteneciente al género Taraxacum, tiene otros nombres según la cultura local: cara de papá, cara de abuelo, amor de hombre, esperanza, amargo, lechuga de perro o ensalada de topo. Su simbolismo se asocia generalmente a la esperanza, libertad, nuevos ciclos y desprendimiento.
Sus semillas se desprenden fácilmente y se abren a nuevos ciclos de vida. Esta característica está asociada a la la libertad, lo desconocido, las aventuras y las nuevas experiencias.
Esta transformación es necesaria para el nacimiento de nuevas flores y esto está relacionado con la renacimiento humana, la identidad y la liberación. Como la flor, algunas personas están en búsqueda de una nueva vida y eso significa enfrentarse a lo nuevo y a lo desconocido.
El diente de león también puede estar relacionado con la inocencia y la infanciaLos niños se divierten mucho soplando la flor, actuando con mucha alegría y despreocupación, algo que los adultos necesitan redescubrir para vivir con más ligereza.
La cultura griega asocia el diente de león con fuerza, esperanza y confianza. Según la leyenda, antes de matar al Minotauro, Teseo se alimentó de la flor durante 30 días para hacerse más fuerte.
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